El dólar presentó una corrección al cierre de la jornada, aunque durante la semana su fortaleza fue lo más destacado. El principal impulsor fue el sorpresivo dato de empleo en Estados Unidos, que superó las expectativas del mercado y sugirió que la economía estadounidense podría seguir sobrecalentada. Este informe favoreció una tendencia alcista del dólar en Perú y en otras economías latinoamericanas. Otros indicadores publicados durante la semana se mantuvieron en línea con lo esperado, pero no lograron modificar la tendencia ya establecida.
El mercado operó con tasas de interés elevadas, con el rendimiento del bono del Tesoro estadounidense a 10 años alcanzando el 4.10%. Paralelamente, el precio del petróleo Brent se acercó a los 76 dólares por barril. El aumento en los rendimientos refleja la persistente expectativa de una inflación aún consistente, lo que podría disuadir a la Reserva Federal de reducir las tasas de interés en el corto plazo. De hecho, la probabilidad de un recorte de 50 puntos básicos por parte de la FED prácticamente se ha desvanecido. Durante la semana, la curva de rendimientos se desinvirtió, aunque el rendimiento de la letra a 3 meses cerró en negativo pese a los datos inflacionarios superiores a lo esperado.
El dólar Index avanzó por segunda semana consecutiva, acercándose a los máximos de agosto. Sin embargo, pese a la fortaleza del billete verde, el oro registró un repunte y cerró la semana al alza, comportamiento que sorprendió dada la subida en los rendimientos.
En los mercados bursátiles, el S&P 500 y el Dow Jones continuaron con su rally alcista, marcando nuevos máximos históricos. El S&P 500 alcanzó su 45º máximo en lo que va del año, consolidando el 2024 como uno de los mejores años en términos de rentabilidad del siglo. Además, la Reserva Federal incrementó su liquidez neta en 100 mil millones de dólares en los últimos días, tras una contracción de 340 mil millones al cierre del tercer trimestre, lo que podría anticipar un mayor incremento en la liquidez durante las próximas semanas, a medida que se acerca la fecha límite de endeudamiento del gobierno estadounidense, fijada para el 1 de enero de 2025.
Los inversionistas que tomaron posiciones de bajo riesgo tras el recorte de tasas de la FED fueron penalizados, mientras que aquellos que apostaron por activos de renta variable vieron una notable mejora en sus rendimientos. Este entorno favoreció a los inversores más arriesgados, quienes obtuvieron beneficios considerables en sus portafolios.
Las elecciones presidenciales de 2024 en Estados Unidos se perfilan como un evento clave. La contienda entre Donald Trump y Kamala Harris se mantiene reñida, con Trump enfrentando desafíos legales y Harris captando nuevos votantes para el Partido Demócrata tras la retirada de Joe Biden. Las encuestas muestran un escenario competitivo en estados clave, donde Trump lidera en temas económicos y de seguridad fronteriza, mientras Harris sigue consolidando su base de apoyo.