- En junio de 2024, la economía peruana creció un modesto 0,21%, destacándose sectores como Transporte, Comercio, Telecomunicaciones, Servicios Prestados a Empresas, Pesca, Alojamiento y Restaurantes, así como Otros Servicios.
- Sin embargo, contracciones significativas en sectores clave como Minería e Hidrocarburos, Construcción y Agropecuario limitaron el crecimiento general según el INEI.
- Las exportaciones de productos no tradicionales aumentaron un notable 14,29% en junio, impulsadas por envíos de productos agropecuarios, textiles, químicos, metalmecánicos y siderometalúrgicos.
- En el primer semestre de 2024, la economía peruana creció un 2,49%, marcando una desaceleración respecto a expectativas previas, con un crecimiento interanual de apenas 0,90% de julio de 2023 a junio de 2024.
En junio de 2024, la economía peruana experimentó un modesto crecimiento del 0,21%, impulsado por el buen desempeño de sectores como Transporte, Comercio, Telecomunicaciones, Servicios Prestados a Empresas, Pesca, Alojamiento y Restaurantes, y Otros Servicios. Sin embargo, este crecimiento fue insuficiente para compensar las contracciones en sectores clave como Minería e Hidrocarburos, Construcción y Agropecuario, que frenaron el impulso económico general, según reportó el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
Anteriormente, la economía había logrado crecer a tasas superiores al 5% en abril y mayo, lo que generó optimismo entre los funcionarios del gobierno y los economistas, quienes anticipaban que Perú podría superar las expectativas de crecimiento para 2024. Sin embargo, la realidad en junio mostró un panorama más sombrío, con los sectores minero, de construcción y agrícola arrastrando el crecimiento general del país.
En el contexto internacional, las exportaciones de productos no tradicionales crecieron un 14,29% en junio, impulsadas por un aumento en los envíos de productos agropecuarios, textiles, químicos, metalmecánicos y siderometalúrgicos. Este fuerte desempeño en el comercio exterior contrastó con el débil crecimiento interno.
En cuanto al acumulado del primer semestre de 2024, la economía peruana creció un 2,49%, mientras que en los últimos doce meses, de julio de 2023 a junio de 2024, la variación fue de apenas 0,90%. Este desempeño refleja una desaceleración significativa, especialmente cuando se compara con las expectativas iniciales.
El índice de actividad económica, un indicador indirecto del Producto Interno Bruto (PIB), aumentó solo un 0,21% en junio respecto al mismo mes del año anterior, una cifra que se quedó por debajo incluso de las previsiones más pesimistas, que proyectaban un crecimiento del 1,8% según una encuesta de Bloomberg entre nueve economistas.
El Primer Ministro Gustavo Adrianzen, en una publicación en X, sugirió que la economía podría haber crecido casi un 4% en la primera mitad del año, atribuyéndolo a la «generación de confianza, estabilidad y transparencia». Sin embargo, las cifras del INEI mostraron un crecimiento mucho menor, de solo 2,5% en ese periodo, desafiando las proyecciones optimistas del gobierno.
A pesar de algunos avances en sectores específicos, la economía peruana se mantiene en un estado frágil, con sectores clave bajo presión y un crecimiento que no logra alcanzar las expectativas planteadas a principios de año.