Esta noche, la Oficina Nacional de Estadísticas de China informó que el PIB del país en el segundo trimestre aumentó un 4.7% interanual, por debajo de las expectativas de un crecimiento del 5.1%, según una encuesta de Reuters.
Las ventas minoristas también estuvieron por debajo de las expectativas, aumentando un 2% interanual en junio, frente al pronóstico del 3.3%. Sin embargo, la producción industrial superó las expectativas, con un aumento del 5.3% en junio en comparación con el año anterior, por encima del aumento pronosticado del 5%.
La inversión en activos fijos urbanos para los primeros seis meses del año aumentó un 3.9%, en línea con las expectativas.
Las exportaciones de China aumentaron un 8.6% más de lo esperado en comparación con el año anterior, según los datos de aduanas publicados el viernes. Sin embargo, las importaciones cayeron un 2.3% interanual en junio, no cumpliendo con las expectativas de un ligero crecimiento.
Impacto para los exportadores de metales
La desaceleración en el crecimiento del PIB de China y el desempeño más débil de las ventas minoristas pueden generar incertidumbre para los exportadores de metales en países como Chile y Perú. China es un importante consumidor de metales como el cobre, y una demanda interna más débil podría afectar negativamente los precios y las exportaciones.
Sin embargo, el crecimiento más fuerte de lo esperado en la producción industrial podría mitigar parte de este impacto, ya que sugiere una demanda continua de metales para la fabricación y la infraestructura.
El aumento de las exportaciones chinas podría reflejar una recuperación en algunos sectores, aunque la caída en las importaciones indica una posible reducción en la demanda interna de materias primas.
Sin duda, un escenario ambiguo que posiblemente repercutirá en la presión del dólar en la apertura del lunes en los mercados latinoamericanos.