- El dólar estadounidense cerca de mínimos de siete meses debido a la expectativa de un aterrizaje suave de la economía de EE.UU.
- El peso mexicano se debilita por la liquidación del carry trade, afectando la tendencia alcista previa.
- Caída del precio del petróleo tras la noticia de un posible alto el fuego en Gaza y la desaceleración económica en China.
- Las declaraciones de Raphael Bostic y Michael Barr hoy serán clave para el futuro del dólar y su impacto en las monedas emergentes.
- El Banco Popular de China mantiene sin cambios sus tasas de referencia, lo que sugiere un enfoque conservador ante los desafíos económicos.
- El S&P 500 cerca de su máximo histórico y el oro sube hasta los 2510 dólares por onza.
El dólar estadounidense, tras mantenerse cerca de mínimos de siete meses, refleja una suavización en las expectativas económicas de Estados Unidos. Inicialmente, los mercados temían una recesión, pero hoy prevalece la narrativa de un «aterrizaje suave», donde la economía se desacelera sin caer en recesión. Sin embargo, esta visión optimista depende en gran medida de las palabras del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, quien el viernes se dirigirá a los mercados en el Simposio de Jackson Hole. Esta intervención será clave para confirmar si los analistas están en lo correcto sobre el rumbo de la política monetaria.
Este panorama también afecta directamente a las monedas latinoamericanas. Por ejemplo, el peso mexicano se ha debilitado recientemente. A pesar de mantener tasas de interés relativamente altas en 10,75%, la liquidación del carry trade —una estrategia que hasta ahora había favorecido al peso— ha provocado una salida de capital. Los operadores habían estado tomando préstamos en monedas de tasas más bajas, como el yen japonés, para invertir en pesos mexicanos y obtener beneficios de la diferencia en tasas de interés. No obstante, los rumores sobre el fin de esta estrategia han impulsado la apreciación del yen y debilitado al peso.
El peso mexicano no es el único afectado. La fortaleza del dólar y la caída en los precios del petróleo también han repercutido en otras monedas de la región. El precio del crudo ha caído a su nivel más bajo en dos semanas tras la noticia de un posible alto el fuego en Gaza, lo que relajaría las tensiones en Medio Oriente y reduciría las interrupciones en el suministro de petróleo. Además, la actividad fabril en China continúa desacelerándose, lo que implica una menor demanda de petróleo por parte del mayor importador mundial, lo que presiona aún más a las economías latinoamericanas dependientes de las exportaciones de materias primas.
En el frente monetario, el Banco Popular de China decidió mantener sin cambios sus tasas de referencia, lo que refleja su enfoque conservador ante la desaceleración económica. A pesar de los recientes desafíos, China opta por mantener las tasas estables en lugar de recortarlas, lo que indica cautela en su manejo de los estímulos.
En este contexto, los comentarios de altos funcionarios de la Reserva Federal, como Raphael Bostic y Michael Barr, que hablarán hoy, podrían arrojar más luz sobre el futuro del dólar. Estos discursos podrían influir en las expectativas de los mercados sobre las tasas de interés, afectando a las monedas emergentes, incluida la de Perú, que está expuesta a estas fluctuaciones internacionales.
En Wall Street, los mercados siguen en una racha ganadora, con el S&P 500 cerca de alcanzar su máximo histórico. El oro, por su parte, continúa su ascenso y ha alcanzado los 2510 dólares por onza, lo que refleja la creciente demanda de activos seguros en un entorno de incertidumbre.