El tipo de cambio cerró este miércoles 19 de junio en S/ 3,5920, marcando una ligera apreciación del dólar frente al sol, tras haber iniciado la jornada en S/ 3,5850. Durante la sesión, el tipo de cambio interbancario osciló entre S/ 3,5770 y S/ 3,5910, con un promedio de S/ 3,5840, según Datatec. La jornada reflejó un rebote técnico tras los mínimos de ayer, cuando el dólar tocó su nivel más bajo desde mediados de 2023.
A nivel global, Goldman Sachs destaca que el dólar ha retrocedido más de 7% en lo que va del año frente a casi todas las principales monedas —excepto la rupia india— reflejando un cambio estructural en las carteras globales tras años de sobreponderación en activos estadounidenses. En el Perú, esta tendencia se ha reflejado en una apreciación acumulada del sol de 4,49% en 2025, a pesar del leve retroceso de hoy.
En el plano geopolítico, el mercado permanece en alerta ante el conflicto entre Irán e Israel. Hoy, Irán atacó el hospital más grande del sur de Israel, y según fuentes de la Casa Blanca, el presidente Trump está considerando autorizar ataques a instalaciones nucleares iraníes, en especial el complejo de Fordow. Aunque aprobó planes operativos en privado, aún no ha emitido la orden final. Se espera una decisión definitiva en un plazo de dos semanas. Por su parte, Turquía respaldó el derecho de Irán a defenderse, y el OIEA afirmó que no hay evidencia de desvíos en el programa nuclear iraní.
Este ambiente de tensión impulsó el precio del crudo Brent al alza, con un avance de 2,8% hasta los 78,85 dólares por barril. JP Morgan advirtió que un posible cierre del Estrecho de Ormuz tendría un impacto sostenido sobre los precios del petróleo y efectos significativos en la macroeconomía global.
En América Latina, la mayoría de monedas mostró un comportamiento mixto: el peso colombiano cayó 0,50%, el peso mexicano 0,32%, mientras que el real brasileño se mantuvo estable. El sol peruano, pese a la ligera caída diaria, se mantiene como una de las monedas más fuertes de la región, respaldada por sólidos fundamentos fiscales, un diferencial de tasas favorable y flujos de inversión relativamente estables.